Nos autorizaron a tener Biblias.
RANGONI, Guillermo Omar, Clase 1962.
A los hijos del Tte. Coronel Casañas (director de Penal), y con su permiso, les
enseñaba algo con el libro de Historias Bíblicas el hermano José Norberto, de
Goya Corrientes, que en esa época el trabajaba en la casa de ellos.
Para esa época yo era Asistente de Casañas y trabajaba en el casino de oficiales
con Rubén Arceli.
En una oportunidad fuimos la oficina del Director Casañas, los 5 del cuerpo de
coordinadores de ese momento (Hugo Bordón, Ignacio Loyola, Juan Gómez, Claudio
Ciapezzoni y yo) a pedirle que pudiéramos tener un ejemplar de la Biblia cada
uno de los internos TJ.
Nos sorprendió la cara que puso el Director, no entendía que hacíamos los 5
internos allí, pero nos atendió con mucho respeto, el nos admiraba y accedió a
que tengamos nuestras Biblias.
Les ponían la R de requisa con un sello que tenía un círculo alrededor de la R.
Ese año incorporamos un discurso abreviado en las reuniones de fin de semana,
junto con el estudio de la Atalaya, y se asignaba a uno de los conductores de
escuela que no salían de franco para que las diera.
El año 1984 A pesar que las reuniones todavía eran clandestinas, la de fin de
semana se hacia los domingos a la tarde pero no en una celda, sino al final del
pabellón 7 Alto, en el corredor y contra el ventanal del fondo, todos sentados
en el piso.
Director Casañas: Cuando me fui de baja fui a saludarlo y agradecerle por el
buen trato que el nos daba a los TJ y me dio la mano y me dijo: “Buen gesto,
Pibe”