“Saben ustedes que hago yo con los testigos de Jehová”
CRESPO, Fidel, Clase 1962.
Me bauticé en diciembre de 1979, en esa época vivía en Mendoza. El año 1980 me
tocó el servicio militar en en el Grupo de Artillería 8 del Ejército, Uspallata,
Mza.
Estábamos con Jorge Rivero en el calabozo, entre los malos tratos para
convencernos de que nos pusiéramos la ropa y hacer el servicio militar, un
subteniente nuevo recién llegado del Colegio de Oficiales estando de guardia
vino enojado y nos dijo “saben ustedes que hago yo con los testigos de Jehová” y
sacó su pistola 45 mm. me la puso en la cabeza, me quede callado y solo pude a
Jehová, pero no paso de allí, siguió insultándonos.
Ya había empezado a ser frío en zona alta, nos hizo desnudar por completo, echó
agua al piso y cerró el calabozo.
Cada tanto nos miraba, y cuando se fue nos dijo “nos volveremos a ver”.
Con Jorge hacíamos ejercicios para no congelarnos a la mañana.
Cada vez que le tocaba guardia me ponía la pistola en la cabeza.
En otra oportunidad entró al calabozo un Cabo Primero con un FAL simulando
fusilarnos, estando adentro percutó varias veces y el fusil expulsaba por el
lateral las balas. Deben haberle retirado el percutor, porque nunca disparó.
Nosotros como siempre confiando en Jehová realmente siempre vimos la mano de el.